domingo, 18 de noviembre de 2007

Un poco más de Suiza y tal...

Bueno, acabo de ver el Gran Lebowsky así que me siento inspirado. (Todavía me entra la risa de vez en cuando). Nadie ha meado en mi alfombra, más que nada porque no tengo, pero me he dado cuenta que si uno presume de blog tiene que escribir algo de vez en cuando y aunque me gustaría aplicar la filosofía del nota y pasar de esta mierda... hay algo en mi que me lo impide.



Hoy voy a hablar de mi última visita por estas tierras del Señor: Basel (en alemán), Bâle (en franchute) o Basilea (en cristiano e italiano). Es una ciudad ya pegadita a Alemania (lo justo para no enterarte de una mierda de lo que dice la gente por la Strasse) y el último puerto accesible del Rin (más información en Wikipedia). Empezó el día de una manera un tanto tétrica, visitamos la catedral (creo...) y la particularidad de dicho lugar es que en el reposa el personaje que le da nombre al tinglao en el que me he metido. Por si alguien anda despistado, estoy de Erasmus y por lo tanto... visité la tumba de:




De ese lugar me quedé con una situación peculiar, una chica española quería hacerse una foto junto a la lápida y otra le decía con acento del sur que le daba mal rollo... No comment.

Este inicio un tanto chunguillo unido con el frío glacial del lugar no aventuraba nada bueno... y encima no me había hecho bocadillo. ¡Vaya putada!. Para colmo de males andaba más perdido que Evo Morales en una tienda de Armani y como intento aprender algo de franchute no suelo juntarme siempre con los españoles. Craso error... al menos al principio, porque me pasé todo el puto dia hablando en inglés. Bueno continuando con la visitilla lo siguiente fue cruzar el Rin en una barquichuela atada a un cable (Muy modesno y tecnológico) y mi mayor preocupación en ese momento era la de caer al agua, más que nada porque estaba en un tris de convertirse en hielo y no tenía un martini a mano y tampoco patines. El paisanete de la barca era bastante amigable y se refugiaba en una pequeña habitación: un camarote con un despacho en el que había una vela. Se le habían caído los plomos, pensé. Intenté ver un poco más adentro pero no, no había una calavera a modo de pisapapeles. Una lástima, le daría un toque a ese lugar tan absolutamente delicioso. Recapitulemos, una barca de madera, atada a un cable con un motorcillo que cruza el Rin, a tomar por culo en Basilea, en un sitio tétrico, aguas más frías que la mirada del poli y un camarote lleno de libros con una vela encendida... si tiene que haber una puerta hacia otra dimensión, ¡tiene que estar ahí!.


Por cierto para los que no lo conozcan os presento al Rin:



A que solo de verlo da frío. El agua se movía como a cámara lenta. Indicación inequívoca de que el estado de agitación de las moléculas que la conformaban era reducido y por lo tanto próximo al estado sólido.

(Como lea esto un físico me ata los dos tomos del Tipler a los pies y me tira al lago Leman.)

Dejando frikadas atrás el siguiente lugar que visitamos (por fuera) fue el ayuntamiento, aquí lo tenéis. Evidentemente no pude evitar el preguntar si habían ganado las elecciones los socialistas, al verlo lo comprenderéis:







Es un chascarrillo un tanto imbécil, pero era el único edificio rojo de los alrededores. Mis sospechas estaban bien fundadas.


Una vez visto este monumento izquierdista je je je je. Foto a la japonesa y a tomar por c.... nos pusimos en movimiento para no entrar en estado de congelación y paseamos por el centro comercial de la villa. Tiendas caras, regalos de navidad. Gente con pasta, gente con ipods, hombres de negocios en sus patinetes... lo normal en Suiza. Y como siempre, Rolex, Federer, Alinghi y Victorinox, marcas de prestigio.

Después de esto fuimos a una cervecería típica, y me senté con los organizadores del viaje (un suizo alemán y su novia o hermana) , una japonesa, una de Singapur y un iraní que hacia teleco. ¡Toma alianza de civilizaciones!, me puse a hablar con el iraní y obtuve bastante información para destruir el imperialis... digo para escoger proyecto. Por cierto, la cerveza de muerte. Aunque la gente un tanto rarilla, baje a hacer pis (consecuencia de la magnifica cerveza) y mientras estaba meando un paisano me soltó unas palabrejas en alemán, comprobé que no le estaba salpicando los zapatos y después le dije en inglés que de teutón ni los buenos dias. No obtuve respuesta. Me largué de ahí rapidillo, no fuera a ser que el pavo ese estuviera tirando los tejos o algo peor. Después de esta experiencia desagradable volví a mi mesa y me zampé un pretzel de dimensiones titánicas. (El panecillo ese con sal y forma de lazo, el que vende Marge en ese capítulo de los Simpson en el que la mafia y la Yakuza se dan de leches en el jardín del 742 deEvergreen Terrace).

La siguiente parada, después de salir de la cervecería fue una fuente con unas esculturas mecanizadas de un artista chiflado de la villa. Iba a poner un vídeo pero esto no sube ni a patadas así que una foto y listos:







Arrr! , se me olvidó mencionar que el pueblo estaba en fiestas, y no, no habían traído una orquesta ni una discoteca ambulante como en España. Ni siquiera una misera barra móvil donde enchufar garrafón al personal. Aquí la fiesta se resume en poner atracciones de feria por todos laos. Norias, casas del horror y demás artilugios para segregar adrenalina o para cambiar el frió por el miedo. Como mi bolsillo no esta para desperdiciar francos (aquí comer es caro) y como era un buen pretexto para no andar pagando torturas. Simplemente observé las máquinas del terror y descubrí con deleite que los suizos también gritan, menos que el resto de los humanos, pero gritan:



Como ya estoy harto de escribir os diré que la visita termino tomando otra cerveza en el único rascacielos de la ciudad, en una pseudo fiestecilla de dos horas ( había que volver cagando mistos al tren para llegar a Lausanne). El sitio era bastante impresionante, en plan VIP, aunque no estaba Pocholo pinchando y eso le quitó bastante Glamour. De esto voy a intentar poner otro vídeo, a ver si funciona. Y luego una foto y se acabó. Que ya no me queda ninguna golosina y me estoy aburriendo de decir chorradas. A demás corro el riesgo de que alguno de vosotros ¡oh lectores carísimos! me espetéis el tan de moda ¿Por qué no te callas?. Juas.... No lo he podido evitar... He estado apunto de olvidarme. Que gran monarca el Bourbon digoo... Borbón. (Ojo, en francés es Bourbon como la bebida) :




Ya se que no se ve un pimiento pero es que estaba a contraluz.

Un abrazo a todos y perdonad faltas de ortografía y demás que tengo sueño y es muy tarde.


3 comentarios:

El Bueno de Cuttlas dijo...

El Gran Lebowsky es una religión y El Nota es su profeta. Si hay algo que aprendí en Vietnam es que las alfombras hay guardarlas cuando vienen a tu casa los tipos más friquis de Los Ángeles, sobretodo si tienen incontinencia urinaria. Los hermanos Coen son unos genios, y su próxima peli que ya está a punto de estrenarse, "No country for old men", que han hecho con Javier Bardem, tiene una pinta estupenda.
Cuidate Álex, y sigue escribiendo que te leo.
Viva Groucho. Abrazos,

Rodri.

xuanqui dijo...

Hey campeón! Qué tal? Acabo de leer tu post (a una hora un tanto rara, es que vengo de atracar la nevera... ya sabes...) y he decidido dejarte un comentario para que veas que no me olvido de ti. Quiero matizar que el fervor por Federer se debe a que el chaval nació en Basilea (Wikipedia dixit) y digamos que debe ser el héroe local, no como los jugadores del Thun que por donde pasan no vuelven a crecer los hímenes. Mal chiste, lo sé. Lo de la foto en la tumba considéralo la anécdota del día, no le des más vueltas porque quizás no tenga una explicación plausible.
Si vuelves a hablar con el iraní, pregúntale por sus pistachos (cuando leas un email que te he enviado ya verás por dónde van los tiros).
Respecto a lo del tío en el baño, la mejor manera de saber si quiere "rollo" es echarse un poco para atrás y mirar al sujeto en cuestión. Si pone buena cara es que hay química. Si pone mala cara es que le estás salpicando. XDDDD.
Por último, de nuestro Rey no te voy a contar nada que no sepas pero creo que deberías dedicarle unas palabras, o un post entero, a Fernando Fernán Gómez. Un abrazo compañero.

Llibre dijo...

Pinti!! cómo lo llevas, jodío. mira que no sé ná de ti, a ver si te conectas algo, tío. Bueno, supongo que disfrutando de las delicias suizas (y inclues les femmes) que otro año comme celui-ci, no vas a tenerlo jamais.